Falta mucho para dar un buen uso del periodismo digital en en medios latinoamericanos

Un estudio a los principales periódicos de Latinoamérica reveló que los medios digitales aún dependen mucho de su versión en papel, y que actualente se utilizan pocos periodistas para los diarios en línea.

Durante la reunión de la Sociedad Interamericana de Prensa (SIP) se dio a conocer un estudio realizado a 43 sitios de los periódicos más importantes de América Latina.

El estudio arrojó datos interesantes para que nos demos una idea del panorama actual del periodismo digital en nuestra región, entre los cuales llama la atención que un 42 por ciento de los diarios tiene solo tres o menos periodistas encargándose de sus sitios, y un 24 por ciento tienen entre cuatro y ocho periodistas para el trabajo.

Con estos datos nos damos cuenta de que si bien es cierto que en el área se está implementando el uso de diarios para Internet, no se ha mostrado el suficiente interés por desarrollar mejor la información que se ofrece en el medio digital.

Ha costado mucho superar la idea del diario impreso, y por este motivo el medio digital sigue dependiendo mucho de la información que se ofrece en el periódico.

Según el estudio de la SIP, un 74 por ciento de los diarios piensa integrar sus redacciones en línea con las impresas, pero son muy pocos los que están pensando en realizar este cambio a corto plazo.

Actualmente casi no tenemos medios digitales grandes totalmente autónomos. Aún nos falta mucho para lograr un desarrollo pleno de la Internet como medio informativo. Parece que nos hemos aferrado mucho a los medios tradicionales, al punto que no ha existido la suficiente atención a la capacitación de periodistas para los productos multimedia.

Claramente Internet es el medio por excelencia que reúne las principales características de los medios tradicionales. Además abarata los costos y es la herramienta perfecta para ofrecer información de todo tipo con un increíble grado de actualización.

El paso que todos los diarios deben dar es el movimiento hacia Internet, y en latinoamérica ese paso se está dando muy lentamente.

Publicidad: oportunidad para crear

Los usuarios de la red están cambiando y de su lado la publicidad viene a invertir más en ellos, hoy por hoy es un buen momento para que los periodistas propongan un negocio informativo rentable.

La Internet y su crecimiento desmedido ha proporcionado infinidad de oportunidades para profesionales como nosotros los periodistas. En palabras de Mauricio Vásquez, de Mediacontacts, "Internet no solo goza del alcance y el impacto que tienen otros medios, a varios ya los ha rebasado, y seguirá por este camino de crecimiento, debido a que cada día aumenta el uso y las horas que se le dedican".

Esto es una oportunidad para todos aquellos profesionales en comunicación que desean independizarse y crear nuevas alternativas de información. Eye Track 2007, un estudio del Poynter Institute, centro interesado en la mejora del periodismo, revela que el mito de que el lector de noticias online es "disperso" ya no se sostiene: el porcentaje de una historia escrita que se lee en Internet es de un 77%, mientras que en periódico es del 62% y en un tabloide de sólo un 57%… y un 66% de los que leen noticias en Internet cuando eligen una noticia la leen completa.

Los resultados implican que el grado de dispersión no es tanto, que el escaneo es más selectivo en la red y que, contrario a lo que se cree, el usuario de Internet lee más que el de papel. Por tanto, es una gran oportunidad para colocar una revista, un diario on-line, un j-blog que podria sostenerse con el boom de la mercadotencia en la red.

Vásquez propuso que las empresas tienen que hacer algo ya que sus consumidores están cambiando sus hábitos en cuanto a consumo de medios. Aunque el panorama general es que el medio cibernético sigue estando sin el porcentaje de inversión publicitaria que le corresponde, poco a poco se irá ajustando en volumen de inversión y en la cantidad de empresas que los contemplen.

El reto del comunicador es realizar productos atractivos, con alta credibilidad y poder así atraer publicidad, y con ello poder invertir en mejoras para el público ante la posibilidad de hacer un negocio rentable y sincero. Esta es una nueva salida ante la cantidad de desempleo, las presiones político-económicas que manejan los grandes medios, una posiblidad de ser creativos y alcanzar muchos más lectores o por lo menos visitantes fieles.

Ante todo, lo imprescindible es focalizarse en un público específico, pues los usuarios de la red buscar información de un tema determinado y los publicistas usarán ello para pautar en nuestro medio. Resulta un círculo de beneficio tanto para nosotros, para la compañía que paute, así como para el cliente-lector. El público sabe lo que quiere, las masas ya no son homogéneas y las diferencias son las puntos donde hay que centrar los esfuerzos.

Participación cuidadana

El artículo Nosotros, el medio plantea diversas interrogantes a lo largo de sus capítulos. ¿Tenemos los ciudadanos derechos en materia informativa? ¿La libertad de expresión es para nosotros o sólo para los periodistas y concesionarios de los medios? ¿Tenemos derecho a saber?, ¿Los ciudadanos podemos manejar nuestros propios medios de comunicación, como en tantos otros países del mundo?

Normalmente cuando nos referimos informar, tendemos a creer que es un tema que sólo compete a los periodistas y medios de comunicación. Sin embargo el ejercicio de este derecho por parte de la ciudadanía es esencial para la democracia, al fin y al cabo somos cuidadanos también!! Por otra parte es importante recalcar que los datos que son emitidos por los medios de comunicación (audiovisuales, escritos o electrónicos) forma parte esencial de la vida de muchas personas y es partir de ella que se conforma una idea de la realidad, que se construyen opiniones o se toman decisiones.

La información es un bien social y los medios de comunicación suelen hacer uso muchas veces de ella más para intereses de grupo que para beneficio de la sociedad en su conjunto. Es con el manejo de la información que los medios de comunicación se han convertido en otro poder en el mundo: tiran y levantan políticos, hacen líderes de la noche a la mañana, establecen la agenda pública, generan corrientes de opinión.

Pero para un medio alternativo o cultural, como suelen llamárseles, se les hace muy difícil sobrevivir. Si no hay publicidad no hay sustento. La crítica, el análisis, o la ventilación de hechos, la línea editorial, a menudo están supeditados a los anuncios. Una de las pocas salidas para los ciudadanos es la posibilidad de acceder a las nuevas tecnologías (porque con esto también sigue las discriminación a los más pobres), donde aún no se han impuesto tantas censuras y existe la gratuidad en mayor o menor grado, encontraron un nicho para su derecho a comunicar que en otros campos se ha cerrado.

Weblogs, foros, comunidades virtuales, infinidad de lugares para expresarse. Se usan y abusan, pero representan un reto para los medios convencionales. Las personas han dejado de ver tanta televisión para navegar más en la red, han dejado de leer el periódico por su carácter estático frente a la interactividad. El reto de los comunicadores es buscar esos nuevos temas emergentes, tendencias, las nuevas fuentes, innovar. Cualquier ciudadano puede poner a disposición en la Internet datos, ideas, pero aún es necesario el periodista para analizar, contextualizar, verificar, investigar. Allí su función profesional.

El público debe ser tomado en cuenta para replantear la agenda. Los periodistas deben ejercer su función dando voz a esos grupos invisibilizados, a la gente “normal”, ser una prensa vigilante. Se necesita una sociedad que se exprese, medios que les faciliten ello y periodistas que se preocupen por ejecutar un trabajo de servicio al pueblo.